Presentaciones espectaculares, ponentes venidos del otro lado del charco, curtidos en la NBA, campeones de Europa y que, además, están disponibles para todo lo que les pedimos. Ponentes que se llaman Igor Kokoskov, en definitiva, y de los que desde ya mismo somos seguidores: La excelencia comienza en el nivel humano e Igor nos tiene ganados. Él, mejor que nadie, resume la grandeza a la que deberíamos aspirar cuando nos ponemos al frente de un equipo y nos hacemos llamar entrenadores.
La excelencia comienza en el nivel humano e Igor nos tiene ganados.
También Josep María Izquierdo, por supuesto, pareja baloncestística de Zeljko Obradovic durante casi tres décadas, rayó a un gran nivel. En su caso, parece que es cierto que el primer recuerdo (Copa de Europa de 1994 conquistada por Joventut de Badalona) es el más importante de todos, pero, después de conocerle, no tenemos ninguna duda de que cada día añade algún nuevo aliciente a su relación. Pasarán los años, cambiarán las piezas, pero mientras la dupla Obradovic-Izquierdo siga en activo, Fenerbahçe tendrá un sello reconocible que parte del trabajo defensivo que nos expuso su entrenador ayudante, un trabajo tan estructurado como rico en detalles.
Carles Duran, por su parte, nos habló de la táctica ofensiva al servicio de la promoción del talento del jugador. Ese es también el sello de la Penya, la promoción de los activos propios, imprescindibles para mantener un vínculo identitario con su afición y cuadrar las cuentas a final de año. Todo desde el 3×0, el comodín que no siempre utilizamos al nivel de sus inmensas posibilidades.
Pero más allá de los nombres, si algo pretende este curso Pro Coach, es innovar en técnicas y metodologías docentes.
De ahí que les pidiéramos a Carles e Igor desarrollar un par de ejercicios “fetiche” de entre los que conforman su arsenal habitual, evolucionándolos in situ y compartiendo con los alumnos los propósitos de cada uno de ellos. Además, quiso unirse a esta nueva experiencia un Porfirio Fisac, al que le van los retos, también los ligados con la formación. Solo hay una certeza para el tiempo que vendrá: Porfi seguirá fascinándonos.
También retamos a nuestros alumnos a demostrar, mediante el uso de una aplicación educativa, la asimilación de los contenidos del día. Solo tres pudieron subir al podio, pero mañana, y los entrenadores lo sabemos bien, será otro día y la competición se promete igualada. Otro día, eso sí, en el que desde Sport Coach nos atreveremos a forzar los límites de la enseñanza tradicional, en el que nos fascinará el conocimiento atesorado de nuestros ponentes y en el que, a buen seguro, Igor Kokoskov volverá a dejarnos un sinfín de lecciones, aplicables dentro y fuera de la pista, en el cadete del pueblo o al frente de un equipo de la NBA.